Fernando Arteaga comparte su historia de vocación y pasión en el día del periodista

En el marco del Día del Periodista Hondureño, Fernando Arteaga, actual periodista de Canal 11, comparte su trayectoria, marcada por la vocación heredada de su padre y una pasión que nació en las calles, entre cámaras, micrófonos y una sed incansable de informar.

“Desde muy pequeño mi padre, el también periodista Nery Arteaga, me inculcó esta magnífica profesión”, recuerda Fernando con una sonrisa. Aunque en un inicio su interés estaba en otro rumbo estudiaba mercadotecnia, su cercanía diaria con el mundo periodístico lo atrapó sin darse cuenta. “Primero inicié como su asistente, luego aprendí de todo un poco: camarógrafo, editor, y hasta en el máster le apoyaba con su programa”.

Su primer contacto directo con el público se dio en pleno Mundial de Brasil 2014, cuando su padre le pidió hacer encuestas deportivas en el centro de Tegucigalpa. “Ahí descubrí que me gustaba, sentía que lo hacía bien”, comenta. Esa experiencia se convirtió en el punto de quiebre que lo llevó a tomar una decisión clave: en 2015 se inscribió en la carrera de comunicaciones en la Universidad Metropolitana de Honduras.

Desde entonces, Fernando se lanzó de lleno al ejercicio del periodismo. Inició trabajando en el noticiero de su padre y más tarde en Hondured Canal 13, donde tuvo su primera experiencia como presentador del noticiero meridiano. En 2017, su destino dio un giro cuando Alexander Cerrato, actual jefe de prensa de Canal 11, lo observó diariamente cubriendo la fuente del aeropuerto. “Él vio algo en mí y me llamó para hacer una prueba. Fue un reto enorme, pero lo logré”, relata Arteaga, quien ya suma ocho años en este importante medio de comunicación.

Durante su carrera ha cubierto prácticamente todas las fuentes: policiales, salud, política, Congreso Nacional, entre otras. Sin embargo, confiesa que la política es la que más le apasiona. “La cobertura en el Congreso te permite ver la esencia del país, cómo se toman las decisiones que afectan a todos los hondureños”, señala.

Respecto al estado actual del periodismo hondureño, Fernando considera que aún hay mucho por mejorar, especialmente en términos salariales y de beneficios laborales. “El periodismo en Honduras tiene muchas debilidades, pero también muchas bondades. Aquí uno aprende de todo un poco, pero debe haber una verdadera dignificación de la profesión”, enfatiza.

A los futuros periodistas, Fernando les deja un mensaje claro y directo: “No lo hagan por fama ni por querer salir en televisión. Hagan periodismo con pasión, con verdad y con compromiso. Esta profesión no es para quien busca comodidad, sino para quienes quieren servir y transformar realidades”.

Hoy, en el Día del Periodista Hondureño, la historia de Fernando Arteaga nos recuerda que el periodismo es más que una carrera: es un llamado, una misión que se forja en la calle, se respira en las redacciones y se vive con el corazón.

Feliz día del periodista.

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