La Audiencia de Barcelona ha emitido una decisión respecto al caso del exfutbolista Dani Alves, condenado a cuatro años y medio de cárcel por agresión sexual.
Tras los recursos presentados, el tribunal ha optado por dejar en libertad a Alves bajo fianza de un millón de euros, a la espera de la sentencia definitiva.
Según lo acordado, Alves podrá abandonar la prisión al abonar la fianza y entregar sus dos pasaportes (brasileño y español), lo que le impide viajar a Brasil u otros destinos.
Sin embargo, la decisión ha generado controversia, y la abogada de la víctima ha anunciado su intención de recurrirla.
La abogada de Alves había solicitado la libertad del condenado hasta que no existiera sentencia firme, petición que finalmente fue concedida por la Audiencia de Barcelona.
El tribunal ha considerado que ha disminuido el riesgo de fuga de Alves, pero ha impuesto medidas restrictivas, como la prohibición de abandonar el territorio nacional y la obligación de comparecer semanalmente en la Audiencia Provincial de Barcelona.
Además, se ha establecido una distancia de seguridad de 1.000 metros entre Alves y la víctima, así como la prohibición de cualquier tipo de comunicación con ella hasta que exista una sentencia firme.