
Mediante declaraciones, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, respondió este lunes 29 de julio a la orden del fiscal general Johel Zelaya, quien instruyó a la ATIC recolectar pruebas en el órgano electoral y citó a los tres consejeros.
En ese contexto, López denunció públicamente que existe una conspiración desde el propio Estado para debilitar al CNE, y aseguró que se está orquestando una campaña para entorpecer el proceso electoral y afectar la voluntad del pueblo hondureño.
Según sus palabras, hay sectores que están utilizando al Ministerio Público para ejercer presión institucional y detener el desarrollo del cronograma electoral, el cual se encuentra paralizado desde hace más de un mes por falta de consenso entre los consejeros.
Además, la funcionaria reveló que este mismo lunes a las 11:30 de la mañana estaba prevista una sesión del pleno con los tres consejeros, pero no se pudo llevar a cabo debido a “injerencias externas” que están interfiriendo directamente en la autonomía del organismo electoral.
Cossette López asegura que el CNE no se opone a la investigación
Frente a la decisión de abrir una investigación y citar a los consejeros, Cossette López aseguró que el CNE no se opone a ser auditado, pero exigió que también se investigue la presión política, las amenazas públicas y los intentos por imponer decisiones ajenas al reglamento institucional.
Finalmente, expresó que el CNE continuará firme en su labor constitucional, aunque advirtió que el proceso electoral está en riesgo si no se respeta la independencia del ente. “No se trata de personas, se trata de democracia”, concluyó.