
Tras su llegada al Congreso Nacional, La consejera propietaria del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall, oficializó su renuncia condicionada ante el Congreso Nacional a través del oficio CNE-S-221-2025 dirigido a la diputada Luz Angélica Smith, secretaria de ese poder del Estado.
Carta de renuncia de Ana Paola Hall
En su carta, Hall señaló que su decisión se debe a la pérdida de independencia, el irrespeto institucional y la creciente presión partidaria dentro del organismo electoral. Aseguró que durante su gestión defendió la autonomía del CNE, pero denunció que fue objeto de ataques, presiones ilegales y señalamientos por sostener que el Pleno no puede integrarse sin unanimidad para decisiones clave como el uso del TREP (Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares).
Ana Paola Hall también condenó las agresiones verbales provenientes incluso de miembros de su propio partido, a quienes calificó de inconstantes en su afinidad política y que, según dijo, ahora forman parte de la dirigencia liberal. Reafirmó que no cedería a presiones que la obligaran a actuar fuera del marco legal, y afirmó que sus posturas no constituyen una traición, sino una defensa de la legalidad.

La exconsejera explicó que su decisión se vio influenciada no solo por las condiciones internas del CNE, sino por amenazas que pusieron en riesgo la integridad de su familia, particularmente de su hija.

Aseguró que no puede continuar bajo esas circunstancias y que su renuncia responde también a una exigencia de la autoridad del Partido Liberal y de su jefatura de bancada.
Finalmente, Ana Paola Hall dejó claro que su dimisión es condicionada a que en el mismo acto en que sea aceptada, se elija a su sustituto o sustituta liberal propuesto oficialmente.