
Mediante un dictamen forense, se confirmó que los audios presentados como prueba por el Ministerio Público, dirigido por el fiscal general Johel Zelaya, en la denuncia realizada por el consejero del CNE, Marlon Ochoa, presentan indicios de clonación de voz y manipulación digital. Los registros supuestamente mostraban conversaciones entre la consejera del CNE, Cossette López, y el jefe de bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, relacionadas con el proceso electoral.
Peritaje confirma clonación en grabaciones
El estudio técnico reveló que, aunque los audios conservan ciertas características tonales de la voz de Zambrano, existen diferencias significativas en el pitch, la dinámica espectral y la estructura armónica que indican alteraciones digitales. Se identificaron saltos de energía y tono, patrones repetitivos y una planitud excesiva, típicos de voces generadas o modificadas mediante inteligencia artificial con software como ElevenLabs o Resemble AI, y posteriormente procesadas con herramientas de edición de audio.
Los expertos forenses también señalaron tramos específicos con irregularidades, donde se observan discontinuidades, cambios bruscos en intensidad y alteraciones de textura acústica, confirmando que el audio no fluye de manera natural y que no puede considerarse un registro auténtico del parlamentario.
Este hallazgo pone en duda la veracidad de los audios utilizados como evidencia y subraya la importancia de realizar peritajes rigurosos antes de aceptar registros digitales como pruebas en procesos legales o políticos, especialmente en contextos sensibles como los relacionados con las elecciones y posibles casos de clonación de voz.
