
La diputada nacionalista , Sara Zavala, advirtió sobre las graves consecuencias que enfrentan los 55 mil hondureños afectados por la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS).
Según Zavala, muchas familias se ven obligadas a vender propiedades y vehículos en remate, mientras la incertidumbre legal pone en riesgo su estabilidad económica y familiar.
Zavala señaló que la situación podría generar desintegración familiar, ya que muchos padres podrían ser deportados, dejando a sus hijos en Estados Unidos, mientras otros regresan a Honduras enfrentando desempleo y dificultades económicas.
“La vida se les está poniendo más complicada; muchos tendrán que dejar parte de su corazón allá”, aseguró.
La política también destacó el impacto que tendrá la medida sobre la economía hondureña. Recordó que las remesas enviadas por los hondureños en Estados Unidos, que suman alrededor de 240 millones de dólares, representan una parte importante del Producto Interno Bruto y sostienen la economía del país.
Con la salida de estas personas, se reducirá este ingreso vital.
Zavala cuestionó si el gobierno hondureño ha realizado estudios sobre la fuerza laboral que regresará, incluyendo habilidades y experiencia adquirida en el extranjero, y sobre cómo serán reintegradas estas personas al mercado laboral local. También criticó los bonos que se ofrecen como ayuda, asegurando que no reemplazan la necesidad de empleo estable y oportunidades económicas reales.
Finalmente, Sara Zavala advirtió que, sin planificación ni políticas efectivas, el regreso masivo de hondureños podría agravar la crisis social y económica en el país, generando desempleo, desintegración familiar y un impacto negativo en la economía.