
La población hondureña enfrenta nuevamente una semana marcada por el alza en los precios de los combustibles, con incrementos que llegan hasta 1.68 lempiras por galón.
El ajuste, que entra en vigor a partir del 14 de julio, se suma a una larga lista de aumentos constantes, mientras las rebajas son escasas y mínimas.
En Tegucigalpa, el precio del kerosene sube 1.68 lempiras, alcanzando los 77.31, mientras que la gasolina súper registra un incremento de 0.63 centavos y se sitúa en 104.43 lempiras por galón.
La regular, a pesar de estar subsidiada, también sube 0.63 centavos y llega a 95.53 lempiras. El GLP vehicular sube 0.13 centavos, alcanzando los 47.25 lempiras.
Combustibles en San Pedro Sula
En San Pedro Sula el panorama es igual de crítico. La gasolina súper sube a 102.01 lempiras, la regular a 93.10, y el kerosene también aumenta a 74.87 lempiras.
Aunque algunos derivados como el diésel y el GLP doméstico permanecen subsidiados, los consumidores siguen enfrentando alzas semana tras semana sin una respuesta clara del gobierno.
Los constantes aumentos, acompañados solo por reducciones mínimas y esporádicas, agravan la situación económica de miles de hondureños. Cada alza impacta en el transporte, los alimentos y los productos básicos, mientras el poder adquisitivo de la población sigue disminuyendo sin que se apliquen soluciones reales.