Este viernes, sectores de la población hondureña han expresado un contundente rechazo tras la cadena nacional transmitida ayer jueves, en la que se convocó a activistas y todo miembro del actual Gobierno para participar en un desfile en apoyo a la presidenta Xiomara Castro. La iniciativa, que ha sido calificada como una maniobra política descarada, ha suscitado muchas críticas por su aparente falta de neutralidad y su uso cuestionable de recursos estatales para fines partidarios.
La precandidata presidencial del Partido Liberal, se manifestó en su cuenta de X, comparó el evento con las prácticas de gobiernos pasados. En su publicación, cuestionó: "¿Recuerdan que JOH, en un acto de desesperación, sacó a todos los funcionarios públicos para que le apoyaran porque sabía que el pueblo lo REPUDIABA? El mismo error lo está haciendo LIBRE, con el agravante que hoy van a apoyar que Honduras es un paraíso para NARCOS gracias a LIBRE". Este comentario refleja la frustración de muchos ciudadanos y actores políticos que ven en este acto estrategias que consideran contrarias a la ética y la transparencia.
El descontento generalizado también se centra en el uso de recursos estatales para fines que parecen estar más enfocados en fortalecer la imagen del partido en el poder, que en resolver los problemas que enfrenta el país. La presencia de militares en el evento ha añadido más leña al fuego, con críticas sobre el hecho de que deberían mantenerse apolíticos y no ser utilizados como soporte para una actividad que claramente tiene tintes partidarios.
Diversos actores de la sociedad han catalogado la cadena nacional y el desfile como un mensaje negativo y un mal ejemplo del uso de la institucionalidad del Estado. La percepción es que LIBRE está utilizando el aparato estatal para su beneficio político en lugar de concentrarse en la gobernabilidad y el bienestar de los hondureños.
