
Mediante una fuerte denuncia pública, la diputada del Partido Nacional, María Antonieta Mejía, acusó al presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, de poner en riesgo la vida e integridad de las consejeras del Consejo Nacional Electoral (CNE), al permitir, según ella, el ingreso de colectivos afines al partido Libre en las instalaciones del hemiciclo legislativo.
“Esto no es un descuido. Es una decisión deliberada”, expresó Mejía, al referirse al ambiente que, a su juicio, se ha generado dentro del Congreso, donde prevalecen el caos, la intimidación y el hostigamiento contra funcionarias del órgano electoral.
La diputada nacionalista también criticó que, en lugar de defender la institucionalidad, Redondo haya optado por ceder espacio a figuras como Marlon Ochoa, consejero propietario del CNE, a quien acusó de incumplir su deber legal de votar y de iniciar una supuesta campaña de persecución política contra sus propias compañeras del pleno.
Mejía calificó la actitud del titular del Congreso como alevosa y no como simple negligencia.
Según su denuncia, el objetivo detrás de esas decisiones sería crear un ambiente hostil y partidario que favorezca los intereses del oficialismo.
“La intención es clara: crear un ambiente donde la ley queda a un lado y se impone el miedo”, afirmó, exigiendo respeto a las reglas democráticas y garantías de seguridad para todos los actores involucrados en el proceso electoral.
Las declaraciones de la diputada se dan en un momento de alta tensión política entre los poderes del Estado, en el marco de los preparativos rumbo a las elecciones generales de 2025 y los conflictos internos dentro del Consejo Nacional Electoral.