La celebración más extravagante de la historia
Según la leyenda, esta fue la fiesta más desenfrenada en la historia del rock. Después de un espectacular concierto en Nueva Orleans el 31 de octubre de 1978, Freddie Mercury y el publicista Bob Gibson organizaron un evento para 500 invitados en el Fairmont Hotel de la ciudad. Describirlo como un desenfreno sería quedarse corto: enanos con bandejas atadas en la cabeza sirviendo cocaína, camareros desnudos distribuyendo caviar y otras sustancias, guerreros zulúes ejecutando danzas tradicionales, strippers transexuales, mujeres con tangas y un servicio de sexo oral disponible para todos los invitados que pasaran por el baño.
El mejor concierto de la historia
Dicen que la calidad prevalece, incluso en la brevedad. Para numerosos aficionados, el pináculo de los conciertos reside en la actuación de Queen durante el Live Aid de 1986, un evento benéfico destinado a recaudar fondos para la lucha contra el sida. Este espectáculo incluyó también a destacadas figuras como Paul McCartney, Dire Straits, Sting y Phil Collins. Aunque la presentación apenas duró 21 minutos, Freddie Mercury y sus compañeros decidieron prepararse a fondo.