
La ciudad de Comayagua amanece con una noticia que ha generado sentimientos encontrados entre su afición: el Club Deportivo Génesis ha anunciado oficialmente su fusión con el equipo de la Policía Nacional. A través de un comunicado difundido en redes sociales, la institución confirmó que esta unión marca el fin de un ciclo inolvidable en la historia del fútbol hondureño y el inicio de una nueva etapa «llena de esperanza y compromiso».
Sin embargo, la realidad detrás del emotivo mensaje deja una sensación amarga: Comayagua se queda nuevamente sin representación en la Liga Nacional. Los partidos del nuevo equipo cuyo nombre aún no ha sido definido se jugarán en La Paz, dejando a los aficionados comayagüenses sin equipo propio en la máxima categoría del fútbol nacional.
La nueva Junta Directiva estará encabezada por el Director de la Policía Nacional, Héctor Gustavo Sánchez, y se espera que la fusión represente una oportunidad de crecimiento institucional. No obstante, varios sectores de la afición cuestionan la decisión de trasladar la sede y diluir la identidad de un club que luchó desde la Segunda División hasta consolidarse en Primera.
Lo paradójico del anuncio es que mientras el fútbol nacional presenta una nueva etapa con el respaldo de la Policía Nacional, en las calles de Honduras la inseguridad sigue en aumento.
