El gobierno actual de Honduras ha anunciado que destinará el subsidio al peaje de la carretera CA-5 norte utilizando los ingresos generados por la misma concesión.
Según Octavio Pineda, titular de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), este subsidio se financiará a través de la Tasa Única de Día Concesionado (TUDC).
Este anuncio ha levantado críticas, ya que contradice las promesas anteriores de eliminar el cobro del peaje para los hondureños.
Marvin Melgar, experto en Asociaciones Público-Privadas (APP), señaló que, en realidad, el gobierno dejará de percibir los ingresos que solían provenir de la concesión.
Estos recursos ahora se redirigirán como subsidio para los usuarios, pagando a la Concesionaria Vial de Honduras (Covi).
Aunque algunos defienden esta medida como una forma de garantizar la equidad en la distribución de ganancias, Melgar advierte que existe el riesgo de que el gobierno desvíe estos recursos hacia otras vías terrestres, desvirtuando así el propósito original de los peajes.
La esencia de este concepto, según Melgar, se pierde si los fondos destinados para mejorar la infraestructura vial se utilizan de manera indiscriminada.
Esta decisión plantea interrogantes sobre la transparencia y la coherencia de las acciones del gobierno, generando descontento entre aquellos que esperaban una eliminación real y efectiva del cobro de peajes en beneficio de la población.