
Una nueva tormenta política golpea al partido Libertad y Refundación (Libre). La diputada Isis Cuéllar, representante por el departamento de Copán, se encuentra en el ojo del huracán luego de la filtración de una conversación telefónica con el ahora exsecretario de Desarrollo Social, José Carlos Cardona, en la que se revelan supuestas irregularidades en el uso de fondos públicos con fines electorales.
A pesar de la gravedad del escándalo, Cuéllar se ha negado a presentar su renuncia y guarda silencio ante la creciente presión pública y mediática. En contraste, Cardona fue destituido de su cargo al frente de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), tras la difusión del polémico audio.
La llamada, que ha circulado ampliamente en redes sociales y medios nacionales, ha encendido las alarmas sobre el presunto desvío de recursos estatales para favorecer campañas políticas del oficialismo. En la grabación, se escuchan presuntas coordinaciones entre ambos funcionarios sobre la utilización de fondos que estarían destinados a programas sociales.
Varios sectores, incluidos representantes de la oposición, organizaciones civiles y ciudadanos, han exigido que Isis Cuéllar sea también separada de su cargo, bajo el argumento de que no puede haber privilegios ni impunidad ante este tipo de hechos.
Hasta el momento, el Congreso Nacional y la bancada de Libre no se han pronunciado oficialmente sobre el futuro de la diputada, mientras crece el clamor ciudadano por una investigación exhaustiva y sanciones ejemplares.
Este nuevo escándalo viene a profundizar la crisis de credibilidad que enfrenta el oficialismo, en un contexto donde la transparencia y la lucha contra la corrupción son demandas constantes de la población hondureña.