Según Maldonado, Hondutel tiene dos caminos, cerrar o buscar la forma de traer un inversionista ya que genera más pérdidas que ganancias lo que también produce retraso en pagos de empleados entre otros factores que hacen que por años los tenga en el ojo del huracán.
Es lamentable como los funcionarios a cargo de los entes del Estado, llegan a tenerlos a cargo y lo único que hacen es quebrarlos, para después, que el país termine vendiéndole a inversionistas las empresas y en cuestión de años, no quede nada, nada que sea propio de los hondureños, ¿y así queremos celebrar el 15 de septiembre? Nada que celebrar.