Mediante una manifestación en el peaje de Zambrano, ubicado al norte de Francisco Morazán, conductores de camioncitos expresaron su descontento por un incremento que consideran ilegal en el costo del peaje.
Según los transportistas, de un día para otro la tarifa pasó de 22 a 90 lempiras, cobrándoles como si fueran vehículos de dos ejes, lo que representa un aumento de 68 lempiras. “Esto nos afecta directamente, prácticamente nos quitan lo de la comida diaria”, denunciaron.
En respuesta a la situación, Mario Ayala, presidente de la Superintendencia de Alianza Público Privada (SAPP), aseguró que se realizarán las investigaciones pertinentes para determinar la legalidad del aumento y buscar soluciones ante las quejas de los conductores.
Finalmente, los camioncitos mantienen su protesta hasta obtener una aclaración sobre la tarifa, mientras esperan una acción concreta de las autoridades para revertir el alza.
