El sacerdote Juan Ángel López expresó su profunda preocupación por lo que considera uno de los problemas más serios que enfrenta Honduras: la pérdida del temor a Dios y el debilitamiento de los valores fundamentales en la sociedad.
En recientes declaraciones, López afirmó que el índice moral en el país es el más bajo y que esta realidad no se refleja en las estadísticas oficiales, pero sí en la conducta diaria de las personas y en el rumbo que ha tomado la vida pública y privada.
“El índice más grave que no aparece reflejado es el índice moral y es el más bajo que tenemos en Honduras, porque hemos perdido el temor de Dios y hemos endiosado posturas y personas”, advirtió Juan Ángel López
Para el religioso, Juan Ángel López esta crisis moral se manifiesta en la polarización política, el irrespeto, la corrupción y la violencia, problemas que asegura se han normalizado en gran parte de la población.
López llamó a una reflexión profunda, invitando a los hondureños a retomar los valores espirituales y éticos como base para reconstruir la convivencia y el respeto mutuo.
Su mensaje ha resonado especialmente en redes sociales, donde diversos sectores coinciden en que, más allá de los indicadores económicos y sociales, el fortalecimiento del carácter y la moral ciudadana es clave para lograr un verdadero cambio en el país.
