
En un emotivo regreso al terreno de juego, el mediocampista de Olimpia, Edwin Rodríguez, se convirtió en protagonista al marcar el gol que le dio la victoria a su equipo en el partido de ida de la gran final del fútbol hondureño ante Real España.
Tras varios meses alejado de las canchas por una lesión, Edwin expresó su sentir entre lágrimas y gratitud. “Muy agradecido con Dios por este momento. No tengo palabras para hablar del partido, solo agradecerle a Dios porque Él ha sabido cómo llevarme. También a mi familia, mi esposa, mis hermanas, y a quienes han estado ahí”, dijo el futbolista visiblemente emocionado.
Rodríguez confesó que durante la semana previa vivió momentos duros, recordando especialmente el partido ante Victoria, donde sintió el peso emocional de su proceso de recuperación. “Era difícil imaginarme disputar una final después de todo, pero hoy estoy feliz. Han sido meses duros”, afirmó.
El jugador también tuvo palabras de reconocimiento para sus compañeros de equipo, quienes según él conocen por lo que ha pasado. “Creo que refleja todo lo que he venido llevando en estos meses. Hoy, gracias a Dios, se me dio la oportunidad de ayudar al equipo”, añadió.
Pese a la alegría del triunfo en San Pedro Sula, Edwin fue claro: la serie aún no está definida. “Esto no ha terminado, vamos a otra batalla en Tegucigalpa. Hoy estamos felices, pero mañana hay que pensar en el siguiente partido e ir a buscar el título con nuestra gente.”
Con este regreso triunfal y cargado de fe, Edwin Rodríguez se convierte no solo en una pieza clave para Olimpia, sino también en un ejemplo de perseverancia y fortaleza emocional.