El abogado Daniel Pérez, quien forma parte del equipo de defensa del expresidente Juan Orlando Hernández, quien guarda prisión en una cárcel de Nueva York, ha denunciado que su cliente, está recibiendo malos tratos dentro del Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn y le han impedido hacer su trabajo.
Fue a través de un correo enviado por Pérez que reclamó: “No nos queda más remedio que llevar ante el juez y los medios de comunicación el maltrato y la vulneración del derecho a la defensa”, inició.
Según el profesional derecho, el poco tiempo que le permiten a la defensa ver a Hernández, les ha impedido revisar con detenimiento las pruebas que existen en contra del exmandatario hondureño, que según comentó la Fiscalía, se trata de un terabyte (Mil gigas) de evidencia.
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“Desde el primer día se nos impide analizar la evidencia con nuestro cliente, nos lleva más de tres horas ver a nuestro cliente y solo nos dan una hora para verlo con una montaña de evidencia de más de un terabyte de datos digitales, pruebas y además de eso nos están dando un problema trayendo la computadora portátil para revisar la evidencia. Todo ello en violación del derecho a la defensa efectiva protegido por la Constitución estadounidense”, lamentó.
Además, Pérez rechazó que ya no le permiten comer la comida relacionada al judaísmo y que se le está negando accesar a su vestimenta alusiva a su religión (Talit) y otros artículos referentes a la misma y tampoco se le permite comer la dieta “Kosher”, también de la religión judía.
Agregó que están preocupados por la comida que le están dando en el MDC y ya no le permiten tener lo relacionado al judaísmo. “En la última audiencia el juez advirtió a la BOP (Agencia Federal de Prisiones) y al gobierno de los Estados Unidos con respecto a estos problemas y, lamentablemente, la BOP ha estado en desacato al Tribunal y lo traerá nuevamente a la Corte”, cerró Pérez.
Cabe resaltar que el exmandatario Hernández, guarda prisión en Estados Unidos por tres delitos que le acusa la Fiscalía de Nueva York relacionados al tráfico de armas y de drogas en perjuicio de Estados Unidos, y podría pasar al menos una cadena perpetua por dichos delitos en caso de ser declarado culpable.