Las elecciones generales del pasado 28 de noviembre, han dejado un sinnúmero de sorpresas en todos los aspectos. Y uno de estos, son los llamados los votos rurales. Haciendo una comparación entre el 2017 cuando el Partido Nacional obtuvo en estos votos un total de 52% en los municipios considerados rurales, en cambio en este proceso 2021 solo obtuvo un total de 32%. Lo que significa una rotunda derrota en las filas nacionalistas y un revés a sus altas cúpulas.
Los votos rurales, fueron los principales aliados en el 2017 y hoy al Partido Nacional por su baja cantidad de votos lo condenan a la penumbra.
De fuerte a débil
Tomando como base el Índice de Desarrollo Municipal del 2015 de cada comuna, se cruzó el porcentaje de cada partido político, lo que antes favoreció ahora dio la estocada final al nacionalismo. Uno de estos ejemplos fue el municipio de Valladolid en el departamento de Lempira donde los votos favorecieron a juan Orlando Hernández y esta vez Nasry Asfura ha perdido.
Otro municipio es Yarula departamento de La Paz, en donde JOH triunfó abrumadoramente en 2017 y hoy “Tito” ha sido el perdedor.
Libre ha sido el gran ganador este 28 de noviembre y ahora, debe cumplir las propuestas que ha prometido a la población dejando claro que los votos no se compran ni con bonos ni con promesas, ya que el PL ha gobernado al país por 12 años y la ciudadanía los ha castigado dándoles la espalda y ha votado por un cambio que Libertad y Refundación les ha ofrecido.
