Ante la crítica situación que enfrentan cientos de pacientes renales en Tegucigalpa, Diálisis de Honduras expresó su preocupación por la negativa de la Unidad Legal de la Secretaría de Salud (Sesal) de permitir que estas personas continúen recibiendo tratamiento en sus instalaciones, a pesar de haber sido autorizadas temporalmente a través de un oficio oficial.
La empresa explicó que en diciembre de 2023, y en respuesta a la solicitud de los propios pacientes que expresaron temor ante otro servicio sin experiencia, decidió asumir de forma humanitaria la atención de más de 500 personas. No obstante, múltiples resoluciones de Sesal han declarado improcedente reconocer dichos servicios, vulnerando el derecho a la salud y a la vida.
Diálisis de Honduras recordó que el 7 de mayo de 2024, mediante una resolución oficial, la Sesal declaró nulo el proceso de contratación que pretendía adjudicar el servicio a otra empresa, debido a irregularidades comprobadas. Pese a ello, la Unidad Legal ha continuado favoreciendo esa decisión, excluyendo a Diálisis de Honduras sin base legal vigente.
A su vez, se denunció que la misma Unidad Legal había emitido anteriormente un dictamen favorable para autorizar temporalmente a Diálisis de Honduras, pero luego cambió de postura, contradiciendo incluso las instrucciones de la ministra de Salud. Esta situación representa no solo una contradicción administrativa, sino también una posible violación a la Ley de Procedimiento Administrativo.
Finalmente, la empresa reiteró su disposición de seguir brindando atención médica de calidad con base en la legalidad, la humanidad y el respeto a los derechos fundamentales de los pacientes.
