Celebración del baile ''Los Diablitos'' en Comayagua, una tradición viva de Honduras
Cada febrero, la ciudad de Comayagua revive una de las tradiciones más antiguas y emblemáticas de Honduras, el Baile de los Diablitos. Esta celebración, que se remonta a hace más de 350 años, es un vibrante recordatorio de la riqueza cultural del país.
Los Diablitos, representados por jóvenes locales que se ofrecen para formar parte de esta festividad, llenan las calles de Comayagua con su energía y colorido. Visten atuendos llamativos y máscaras gigantes, mientras bailan y bromean con los presentes en un recorrido por el pueblo. Este baile es una representación tradicional que tiene sus raíces en la época colonial, simbolizando el enfrentamiento entre Moros y cristianos, y en especial, una devoción religiosa relacionada con la historia de San Sebastián, patrón de la iglesia local.
Una cultura viva en Honduras
El evento se lleva a cabo en el atrio de la iglesia de San Sebastián, lugar emblemático para los comayagüenses, que año tras año se congregan para disfrutar de esta manifestación cultural.
Considerado como la obra de teatro más antigua de Honduras, el Baile de los Diablitos fue presentado por primera vez en 1644, lo que le otorga una relevancia histórica única. A través de los años, la celebración ha logrado mantener su esencia original, heredada por los sacerdotes Mercedarios, quienes la trajeron como una herramienta para evangelizar a las comunidades indígenas. Hoy en día, esta danza sigue siendo una expresión viva de la fe y las tradiciones que definen la cultura hondureña.
El baile se vive con alegría y fervor
El Baile de los Diablitos de Comayagua sigue siendo un símbolo de la resistencia cultural, un evento que conecta a generaciones pasadas con las actuales, y que continúa transmitiendo, con alegría y fervor, el legado de una tradición ancestral.